Estos alumnos, que son más apañados que un jarrillo de lata, han dejado el invernadero sin malas hierbas.
En nuestro centro educativo queremos abordar el problema del cambio climático desde un punto de vista profundo, en el que se trabaje el respeto, la solidaridad y la responsabilidad como valores fundamentales que encontramos en aquellas personas que verdaderamente apuestan por un mundo mejor. Éste ha de ser el lugar donde todos coincidamos en objetivos: no sólo aprender contenidos, sino aprender a convivir respetando la naturaleza que nos rodea y de la cual viven las familias en Lanjarón.
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